Constituir una empresa

Te ayudamos en la creación de tu empresa

Constituir una empresa con CANP, es un proceso sencillo, en el cual, mimamos hasta el último detalle.

 

Nos comprometemos plenamente contigo y tu proyecto, por eso, trabajamos contigo, desde el análisis de viabilidad, la identificación del tipo de persona jurídica más adecuado para constituir una empresa, hasta la operativa diaria.

 

Ponemos a tu disposición todos nuestros recursos, asegurando así, el éxito de tu negocio al constituir la empresa.

 

Te asesoramos en temas mercantiles y fiscales relacionados con la constituir, pero también en la gestión del proceso y su registro.

 

Contamos con una red de notarios colaboradores y expertos en la materia para garantizar un proceso fluido y eficiente.

No lo pienses más y empieza con buen pie a emprender. Alíate con CANP la firma líder en el sector.

Los clientes opinan de CANP

Popo SegrePopo Segre
18:20 02 Sep 24
Trato muy amable y servicial. Adrián muy competente, me explicó los pasos a seguir con mis proyectos. Totalmente recomendable. Sin duda, será mi asesor
pilar escolanopilar escolano
16:09 28 Jun 24
Muy buen servicio, amable y profesional.
Javier SolerJavier Soler
13:49 26 Jun 24
Gracias por solucionar el problema. Pero lo más valioso es la IINFORMACION y el ASEESORAMINETO que das desde la honestidad. Un saludo y gracias Adrián
Paula MichoPaula Micho
20:13 20 Jun 24
Llevaba tiempo dando tumbos con distintas asesorías para llevar la contabilidad y fiscalidad de mi empresa, hasta que di con CANP hace un par de años y desde entonces estoy súper contenta con ellos trato cercano y muy implicados. Asesoría fiscal muy recomendable.
gareth powergareth power
10:31 13 Jun 24
Muy amable y me ayudaron mucho con mis impuestos.
Pedro calvo bayarriPedro calvo bayarri
07:50 20 May 24
Rápido en las gestiones y un trato muy profesional. Gracias por tu trabajo.
Jeronimo LegazJeronimo Legaz
07:16 04 May 24
Muy profesional, rápido y eficiente. Me gustó mucho la atención y profesionalidad con la que me resolvió todo. Me gustó muchísimo y lo recomiendo 100%.
A. MartínezA. Martínez
01:46 10 Feb 24
Me encanta el trato cercano y profesional que tienen. Puedo decir que de verdad me siento tranquilo porque siempre están pendientes a fin de que el tema administrativo de mi negocio marche de manera perfecta. Lo recomiendo en un 100%
js_loader

Pasos para constituir una SL en España: Guía práctica

Si te has decidido a constituir una Sociedad Limitada, es importante conocer los pasos necesarios para hacerlo de manera correcta y sin complicaciones. El proceso de constitución es relativamente sencillo, pero requiere de ciertos trámites administrativos que deben ser bien gestionados para evitar retrasos o problemas futuros.

  1. Obtención del certificado de denominación social: Este es el primer paso, y consiste en solicitar un certificado que garantice que el nombre que deseas para tu empresa está disponible.
  2. Redacción de los estatutos sociales: Los estatutos son las normas que regirán el funcionamiento de la sociedad. Aquí se define el capital social, las funciones de los socios, y las responsabilidades del administrador.
  3. Apertura de una cuenta bancaria y desembolso del capital social: El capital social mínimo para constituir una SL en España es de 3.000 euros, y debe ingresarse en una cuenta a nombre de la sociedad.
  4. Firma de la escritura pública de constitución: Este trámite se realiza ante notario, quien certificará la constitución de la sociedad.
  5. Inscripción en el Registro Mercantil: Finalmente, la SL debe inscribirse en el Registro Mercantil, lo que le otorgará personalidad jurídica.

Este proceso puede parecer complicado, pero con una asesoría especializada puedes realizarlo de manera rápida y eficiente. En CANP, hemos constituido decenas de sociedades para nuestros clientes, asegurándonos de que todo el proceso se realice sin inconvenientes y de acuerdo con la legislación vigente.

Cuando te decides a emprender un negocio en España, una de las decisiones más importantes que debes tomar es la forma jurídica de la empresa. Entre las opciones más comunes, la Sociedad Limitada (SL) destaca como una de las estructuras más atractivas para empresarios que desean proteger su patrimonio personal y optimizar su fiscalidad. Constituir una Sociedad Limitada no solo ofrece ventajas económicas, sino que también proporciona una imagen más profesional ante clientes, inversores y entidades financieras.

En mi experiencia como asesor fiscal y abogado mercantilista con más de 10 años asesorando tanto a empresas como a autónomos, he visto cómo la SL ha permitido a muchos de mis clientes alcanzar un mayor éxito empresarial. La clave está en entender las diferencias entre una Sociedad Limitada y operar como autónomo, y cómo una asesoría fiscal adecuada puede marcar la diferencia en términos de ahorro y eficiencia.

Una de las mayores preocupaciones de cualquier empresario es la posibilidad de enfrentar deudas o responsabilidades legales. Aquí es donde una SL ofrece una ventaja crucial. A diferencia de un autónomo, que responde con todo su patrimonio personal ante cualquier deuda de su actividad, los socios de una Sociedad Limitada solo arriesgan el capital que han aportado a la empresa. Esta limitación de la responsabilidad es esencial para proteger el patrimonio personal en caso de problemas financieros o demandas legales.

He visto muchos casos donde esta diferencia ha sido vital. Un cliente que inicialmente trabajaba como autónomo decidió transformar su negocio en una SL después de una demanda que puso en riesgo sus bienes personales. Al constituir la SL, no solo protegió su patrimonio, sino que también ganó una mayor tranquilidad para seguir creciendo en su actividad.

La fiscalidad es otro de los factores clave que debes considerar. Mientras que un autónomo tributa a través del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), que es progresivo y puede alcanzar tipos impositivos de hasta el 47% en los tramos más altos, una SL tributa por el Impuesto de Sociedades, con un tipo fijo del 25%. Este sistema puede ser mucho más favorable a partir de ciertos niveles de ingresos.

Como asesor, uno de mis principales consejos para clientes con ingresos elevados es optar por una Sociedad Limitada. Por ejemplo, un autónomo con ingresos anuales altos puede terminar pagando una cantidad considerablemente mayor en impuestos que si operara a través de una SL. Además, una SL permite una mejor planificación fiscal, permitiendo combinar un salario con dividendos, lo que puede reducir aún más la carga impositiva.

La constitución de una Sociedad Limitada no solo te permite optimizar tu fiscalidad, sino que también abre la puerta a una serie de oportunidades que como autónomo son más complicadas. Una SL transmite una imagen de mayor profesionalidad, lo que puede ser decisivo para cerrar contratos con clientes más grandes o acceder a financiación bancaria.

Además, atraer inversores resulta mucho más sencillo cuando tu empresa está constituida como una Sociedad Limitada. Al ser una estructura formal, es más fácil vender participaciones o compartir la propiedad con socios estratégicos. Como asesor, he ayudado a muchos de mis clientes a estructurar sus empresas para facilitar la entrada de inversores, lo que ha sido clave en su expansión y éxito a largo plazo.

Un aspecto fundamental para aprovechar al máximo las ventajas de una Sociedad Limitada es contar con una asesoría fiscal especializada. A lo largo de mis años de experiencia, he comprobado que una correcta planificación fiscal puede marcar la diferencia entre una empresa que simplemente sobrevive y una que crece de manera sostenida.

La optimización fiscal en una SL va más allá de la simple reducción de impuestos. También implica aprovechar todas las deducciones disponibles, estructurar de manera eficiente los salarios de los socios y administradores, y planificar la reinversión de beneficios para maximizar el crecimiento de la empresa. Por ejemplo, muchos de mis clientes han conseguido ahorros significativos al optar por retribuirse mediante dividendos, aprovechando las exenciones fiscales disponibles.

A pesar de que constituir una SL es relativamente sencillo, hay errores comunes que pueden generar problemas a largo plazo. Uno de los más habituales es no planificar adecuadamente el reparto de las participaciones sociales entre los socios. Esto puede generar conflictos internos en el futuro, especialmente si la empresa comienza a crecer rápidamente.

Otro error frecuente es no definir claramente las responsabilidades del administrador. En muchas ocasiones, los socios desconocen las implicaciones legales y fiscales que conlleva ser administrador de una SL, lo que puede llevar a sanciones o problemas legales si no se gestiona correctamente.

Como asesor, mi consejo es siempre contar con un equipo especializado que te guíe en estos aspectos para evitar problemas futuros. La constitución de una empresa es solo el primer paso; la verdadera clave está en la gestión eficiente y en la correcta planificación fiscal y legal desde el principio.