Cuando se trata de gestionar las finanzas de un negocio o cumplir con las obligaciones fiscales como persona física, contar con un buen asesoramiento fiscal y contable es esencial. Sin embargo, es natural preguntarse cuánto cuesta este servicio y si realmente vale la pena la inversión. La respuesta no es única, ya que el costo de una asesoría fiscal varía en función de varios factores.
Facturación del cliente
Uno de los factores determinantes en el costo de una asesoría fiscal es la facturación del cliente. Las empresas o autónomos con una facturación más alta generalmente requieren un trabajo más complejo y detallado por parte del asesor fiscal.
Esto significa que, en términos generales, a medida que aumenta la facturación, también lo hace el costo de la asesoría fiscal. Por ejemplo y en mi opinión, un autónomo que factura menos de 25.000€ al año, no es justificado cobrarle más de 60€ + iva al mes.
Tipo de trabajo requerido
El tipo de trabajo que el cliente necesita también influye en el precio de la asesoría. Algunos clientes pueden requerir servicios más especializados, como la planificación fiscal avanzada o la resolución de problemas fiscales complicados. Estos servicios suelen tener un costo adicional debido a la experiencia y el tiempo que requieren.
Por ejemplo, el autónomo que hemos visto en el punto anterior (no cobra más de 25.000€ al año) pero se dedica a la comercialización de productos o servicios por Europa lo cual implica una serie de modelos especiales a presentar a la AEAT, una serie de altas y supervisiones específicas es licito que se le cobre más que a uno que por ejemplo, preste un servicio exclusivamente en territorio nacional y que ingrese anualmente lo mismo que del caso anterior.
Tipo de entidad: Persona física o jurídica
Otro factor que determina el costo de una asesoría fiscal es si el cliente es una persona física o jurídica. Las personas físicas tienen obligaciones fiscales distintas a las empresas, lo que significa que el trabajo del asesor varía en función del tipo de cliente. Por lo tanto, es común que el precio sea diferente para estos dos tipos de entidades.
Costo aproximado de una asesoría fiscal y contable
Para darte una idea más concreta de los costos, aquí tienes un rango aproximado de lo que podrías esperar pagar por una asesoría fiscal:
- Persona física (autónomo): El costo mensual puede variar entre 35 y 60 euros, más el IVA correspondiente. Este precio se adapta a las necesidades de las personas que trabajan por cuenta propia y tienen una facturación más limitada.
- Empresa (persona jurídica): El costo mensual para una empresa suele oscilar entre los 150 y 600 euros, más el IVA.
Las empresas suelen tener una facturación más alta y necesitan una asesoría más completa para cumplir con sus obligaciones fiscales.
El valor de un buen asesoramiento fiscal
Es importante destacar que un buen asesoramiento fiscal y contable ahorra más dinero del que cuesta. Los asesores fiscales están capacitados para encontrar deducciones fiscales, optimizar la estructura financiera de una empresa y evitar problemas con la administración tributaria. Esto puede traducirse en un ahorro significativo a largo plazo.
Además, un asesor fiscal confiable puede proporcionar tranquilidad al cliente, permitiéndoles enfocarse en hacer crecer su negocio en lugar de preocuparse por los aspectos fiscales.Esto tiene un valor incalculable en términos de tiempo y estrés reducido.
En resumen, el costo de una asesoría fiscal y contable varía según varios factores, incluida la facturación, el tipo de trabajo requerido y el tipo de cliente. Aunque puede parecer una inversión, un buen asesoramiento fiscal puede ahorrar más dinero del que cuesta y brindar una valiosa paz mental. Por lo tanto, considerar el asesoramiento fiscal profesional es una decisión inteligente para cualquier empresa o persona física que busque optimizar sus finanzas y cumplir con sus obligaciones fiscales de manera eficiente.